El libro Adonis, como otras grandes voces del siglo XX, ha sido testigo y, al tiempo, profundo defensor de lo humano. Este libro, en impecable traducción de Clara Janés, recoge poemas que proceden de plaquettes o de libros colectivos, con el nexo de unión de su ubicación en torno a Oriente Medio, en un área que incluye el lugar donde el poeta nació, y donde también surgió el primer alfabeto. Nos entrega el poeta su propia visión del origen de la palabra y, entre incienso, aves y huellas, guiados por un caudal de sensaciones; nos lleva a ese lugar denominado Babel, ya no entendida como confusión, sino como el remanso a donde van los locos, los descarriados, aquellos que buscan la libertad que solo da la primera y única herida del mundo. 

«Hay distintas puertas, pero él cruza las puertas de Damasco, sigue las insinuaciones del incienso, pasea por los jardines de Zenobia, elige baños y ungüentos, y perfuma la palabra en cada una de sus letras y sus acciones». CLARA JANÉS

El autor (Siria, 1930) ocupa un lugar privilegiado en la literatura contemporánea en lengua árabe, para la que ha supuesto una auténtica revolución. Fe de ello dan sus más de veinte libros de poesía, entre los que destacan Primeros poemas (1957), Hojas al viento (1958), Canciones de Mihyar el de Damasco (1961), Libro de las mudanzas y huidas por los climas del día y de la noche (1965), Un tiempo entre la rosa y la ceniza (1970), Libro del asedio (1996) y Este es mi nombre (2006). Es además un intelectual de compromiso sólido, como lo demuestran sus numerosos ensayos, artículos y entrevistas dan testimonio de ello. Es considerado un firme candidato al Premio Nobel de Literatura.